Ubicado en una de las calles más emblemáticas del centro de Madrid, este piso de 250 m² construidos (207 m² útiles) se encuentra en una elegante finca clásica de 1910, con fachada representativa y ascensor. Situado en una primera planta, esta propiedad destaca por su imponente presencia y su gran potencial para una reforma personalizada, combinando el encanto de la arquitectura tradicional con la posibilidad de adaptar los espacios a un estilo de vida contemporáneo.
El inmueble cuenta con nueve balcones exteriores, que dotan de una gran luminosidad natural a los espacios principales y ofrecen vistas despejadas a una de las zonas más vibrantes de la ciudad. Su orientación norte garantiza luz constante sin exceso de calor, ideal para mantener una temperatura agradable durante todo el año.
Los techos altos de 3,5 metros potencian la sensación de amplitud y nobleza en todas las estancias, creando un lienzo ideal para destacar elementos originales como molduras, carpinterías antiguas o suelos de época. La distribución actual incluye tres habitaciones y cuatro baños, permitiendo múltiples opciones de redistribución según las necesidades del nuevo propietario.
Ubicado en el codiciado barrio de Justicia–Chueca, este piso es perfecto tanto para vivienda habitual como para inversión, dada la alta demanda en esta zona céntrica y bien conectada. La combinación de metros, altura, balcones y carácter histórico hacen de esta propiedad una pieza única con gran potencial de revalorización.